Pescaito Frito
Suena el despertador en la habitación de mis padres. Mi madre entra despacito a nuestra habitación y nos comienza a despertar con ese cariño que siempre ha puesto en todo lo que hace. Una caricia y luego besitos… Yo era la primera, para eso era la mayor. Después trataba con mis hermanas, dormíamos en la misma habitación. Tardábamos, literalmente, medio segundo en espabilarnos, qué nervios, nos vamos para Almería!